El rosario de fracasos del Ministerio de Ciencia y Tecnología parecía
condenado a su fin. El correcto Informe Soto parecía sentar las bases
de una intervención gubernamental en la sociedad de la información,
y nos prometían por activa y pasiva que el nuevo plan no sería
una reedición del fracasado INFO XXI. Tras la presentación del
nuevo plan no podemos más que tirar la toalla definitivamente: sin objetivos
claros, con declaraciones de intenciones, sin un aumento presupuestario notable,
sin medidas claras de fomento o abaratamiento de las conexiones, hecho sin
la participación de asociaciones o patronales y, en definitiva, sin una voluntad
real de hacer avanzar la sociedad de la información
en España. Tal vez lo que avance, merced a la propaganda, sea la
campaña
electoral de Piqué en Cataluña. El nuevo plan es puro anuncio
político. Y la regulación de los dominios.es, que no entra en
el plan pero lo precede, no es más que el primer despropósito.
Dominios.es, o como acabar con el pequeño ISP y favorecer al
grande
La nueva regulación
de los dominios.es está suponiendo
un grave dolor de cabeza para los pequeños ISP, incapaces de cumplir
las leoninas medidas para convertirse en registrador acreditado, lo que les
está suponiendo
perder clientes y negocio. Convertirse en registrador en España es más
complejo en ciertos requisitos que convertirse en registrador de los dominios ".com".
Con la diferencia de que hay una veintena de millones de dominios puntocom,
y tan solo 50.000 dominios "puntoes". Sin duda la forma de fomentarlo
es entorpecer su registro y dificultar la acreditación de registradores. Medidas
como esta no sólo
acaban con la pequeña empresa ISP española sino que ayuda
a los grandes a ser más grandes (por ejemplo, Arsys se ha convertido
en el primer ISP capaz de registrar ".es"). Todo ello, con el añadido
de que la propia entidad Red.es ha estado enviando correo no solicitado a los
dueños de dominios ".es" publicitando la nueva situación
e ignorando a las empresas que habían gestionado esos registros.
Red.es está a tiempo de flexibilizar sus posturas. Si no lo hace pondrá en
evidencia al ministro/candidato, dejará en ridículo el nuevo
y flamante plan y nos condenará, de nuevo, al ostracismo digital.
Más información:
España.es
un plan de difícil digestión
que reedita errores
del fracasado InfoXXI (AUI)
Piden
la dimisión de los máximos responsables de Red.es (AI)
http://www.caidosdelnic-es.com/